El presidente Martín Vizcarra afirmó que no renunciará al cargo luego que el país fuera testigo de un vil intento de desestebilizar su Gobierno. "Si quieren vacarme, aquí estoy, no me corro. No voy a renunciar", remarcó.
Sabíamos que los grupos opositores a algunas decisiones tomadas sin que nos
tiemble la mano buscarían una nueva oportunidad para sacarnos, hoy fue un nuevo
intento, indicó durante un mensaje a la Nación dado a las 7 de la noche, desde
Palacio de Gobierno.
"Utilizando las mismas prácticas montesinitas han conseguido de manera
ilícita una conversación privada, donde no hay nada ilegal, lo único ilegal es
la utilización de una grabación clandestina presentada en una puesta en escena
como en las mejores épocas de Vladimiro Montesinos", expresó.
"No voy a negar las conversaciones, pero fueron coordinaciones
internas que se hacen en cualquier institución", agregó.
Refiriéndose al audio que se hizo público en el Pleno del Congreso de la
República, Vizcarra informó que el 29 de julio, un periodista de prensa
extranjera les dio conocer de la existencia del audio que se hizo publicó esta
mañana.
Nunca escuchamos nada, dijo, pero esperábamos con la mayor tranquilidad que
lo hagan público porque se trataba de una reunión de trabajo con ningún
contenido ilegal. "Fueron 40 días después que el audio estuvo circulando y
justo hoy lo hacen público", manifestó.
"Todo es una patraña que busca desestabilizar democracia para tomar el
control del Gobierno, aseveró. Continuando que se pretende la reelección de los
congresistas, postergar las elecciones y garantizar su triunfo electoral".
En ese sentido, enfatizó que “estamos contra un complot contra la democracia”.
¿Quién presenta los audios? Preguntó, indicando que es el mismo personaje
convertido hoy en congresista al cual la Fiscalía pidió que le levante la
inmunidad parlamentaria por presuntos delitos de enriquecimiento, peculado
doloso, omisión de funciones y falsificación de documentos, añadió.
"Los audios han sido editados y manipulados maliciosamente y buscan
adrede convertir un reclamo laboral en un hecho delictivo o político, queriendo
sacarme palabras fuera de contexto y pretender acusarme de situación
inexistente, acotó. Nada más lejos de la realidad".
Dijo también que nunca negó conocer al señor Richard Cisneros, lo que si he
dicho y ratifico es que no intervine en sus procesos de contratación, aseveró.
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